La rentabilidad financiera al beneficio económico (o los beneficios) que se obtienen como producto de un recurso propio (o varios) y las inversiones que se realicen. En la rentabilidad financiera se hace relación del beneficio neto que se obtenga producto de una inversión con el recurso que sea necesario para que se obtenga.
Este se usa para tener la valoración de las ganancias que se obtienen con respecto a los recursos que se utilizan.
Es muy importante conocer la rentabilidad que se tiene de una actividad determinada para poder saber qué mejorar o si en efecto se están obteniendo los resultados que se esperaban. En el ámbito de los negocios esta es el fin de todo emprendimiento, obtener rentabilidad financiera.
¿Qué son los ratios y cómo se clasifican?
Entendiendo lo que es la rentabilidad financiera, debemos saber que el ratio de rentabilidad financiera hace referencia a ese indicador de la rentabilidad que se obtiene por cierta actividad. Pero también debemos saber que existe un término general de ratios financieros. Estos ratios de rentabilidad financiera, son más específicos, siguen funcionando como indicador o índice financiero pero más específicos el estado económico y financiero.
Los ratios de rentabilidad financiera, explicándolo de forma sencilla, se suelen clasificar en cuatro grupos:
- El ratio de liquidez: este indicador mide lo disponible o solvente que se encuentre en lo que se refiere a dinero efectivo. Es decir, la capacidad que pueda tener la entidad para la cancelación o cumplimiento de alguna obligación que adquiera en plazos cortos. A su vez, estos ratios tienen una subdivisión para obtener información más específica con los ratios que se refieren a la liquidez corriente, a la prueba ácida o liquidez severa, al capital de trabajo, a la liquidez absoluta (también conocido como efectividad o súper ácida).
- Están también los ratios para endeudamiento: estos son los que se encargan de medir lo que relaciona el capital no propio y el que es propio. También el nivel de deuda que exista en los activos. Estos ratios estiman el nivel de respaldo patrimonial.
También cuenta con su subdivisión, para análisis e índices más específicos para endeudamientos de corto y largo plazo, totales y activos.
- Los ratios en cuanto a rentabilidad específicos, están para indicar lo rentable que sea una entidad con respecto sus inversiones, activos, patrimonios, ventas para determinar cuan eficiente es la operatividad y la gestión que se le da a la empresa. Subdividido en rentabilidad patrimonial, activos, bruta en cuanto a ventas, neta en cuanto a ventas, por acción, y de dividendos por acción.
- Los ratios son indicadores, hay de todo. También encontramos para las gestiones, operatividad o rotación, que mide cuán eficiente se es en cuanto a cobranza, pagos, inventario y activos. Subdividido en rotación en cobros, periodos de cobros, rotación en pagos, rotación pendiente de pagar y de inventario.
¿Qué mide el ROE?
ROE sigue siendo rentabilidad financiera, solo que se conoce así debido a como se expresa en el idioma inglés (Return on Equity). Por lo tanto, mide ese beneficio que se obtiene de acuerdo a la inversión que se realiza.
¿Qué es la rentabilidad financiera de una empresa?
Hablamos de rentabilidad financiera aparte de ROE para tratar de aclarar dudas, son términos sinónimos que miden los beneficios obtenidos por la empresa con referencia a la inversión realizada.
¿Cómo se mide la rentabilidad financiera de una empresa?
La rentabilidad financiera de una empresa, como explicamos anteriormente se obtiene a través del ratio de rentabilidad. Esto se obtiene con una fórmula sencilla, en la cual se divide el beneficio neto entre el patrimonio neto y se multiplica por cien. Debe saber por tanto, calcular el beneficio neto y el patrimonio neto para poder obtener los números de la rentabilidad financiera. Es por eso que se estima la importancia del conocimiento en materia económica para realizar de forma correcta la organización de una empresa.
Calcular la rentabilidad financiera permite a las empresas o emprendedores ajustar su actividad e inversión en aras de obtener los mejores beneficios posibles. Es posible entender, si se está realizando demasiados gastos o no se está obteniendo la rentabilidad esperada. Permitirá entonces realizar una mejor organización, descubriendo las fallas que se puedan estar cometiendo en la ejecución del proyecto o actividad económica de la empresa.