El transporte siempre es una situación esencial tanto para el desarrollo de la vida cotidiana como para la ejecución de alguna actividad económica. Todos se preocupan por tener medios de transporte y siempre poder contar con uno del cual disponer al momento de necesitarlo siempre es una ventaja.
No tener que depender de transportes públicos o buscar un taxi puede significar el no perder tiempo valioso que se puede invertir en otras cosas con mucha mayor importancia o relevancia para la actividad que se realice.
Por esto, es normal que todos los que están siempre pendientes de la consecución de un medio de transporte propio se preocupen por los distintos medios de los que se cuentan para tener disponibilidad siempre que se necesite.
Está claro que adquirir uno es la situación más sencilla pero no la más económica, esto representa una inversión de un capital que puede ser usado para otra cosa o incluso tener que acudir a medios de financiamiento como créditos bancarios, créditos personales, mini créditos, préstamos online o inclusive préstamos con amigos para conseguir el monto necesario para adquirir un vehículo propio.
Es motivado a esto que se suelen buscar medios alternativos para disponer de medios de transporte. Algunos piensan en rentar los vehículos, mientras que la realidad es que existen alternativas parecidas al renting pero que eventualmente a largo plazo pueden resultar más beneficiosas como es el leasing de coches.
El renting y leasing cuentan con muchas características similares, siendo estas dos, alternativas para financiación pero que detalladamente se evidencian diferencias puntuales. Aunque este artículo trate de leasing, debemos conocer bien sobre el renting para poder entender la otra opción que aunque suelen ser vinculadas a vehículos también se puede asociar a otros equipos.
¿Qué significa la palabra renting?
La palabra renting se puede traducir como un contrato donde se alquilan bienes por un determinado tiempo que suele ser más de el año y se realizan pagos a cambio a través de cuotas determinadas en el contrato (pueden ser por mes, trimestral, semestral, anual; depende del contrato que realice).
Para muchos, este término se asocia a la rama de vehículos y aunque es de las modalidades más conocidas, no se limita solo en vehículos sino se extiende hasta equipos.
Cualquier persona física o jurídica puede acceder a este tipo de contratos de alquiler, siempre y cuando cumpla con los requisitos de la entidad que presta el servicio. Para lo cual deberá firmar un contrato, donde se estipulan todas las condiciones y responsabilidades adquiridas por ambas partes.
¿Cómo funciona el sistema de leasing?
El sistema leasing funciona también como contrato donde se arrenda vehículos a largo plazo o mediano plazo pero con la particularidad de que se ofrece como alternativa al finalizar el contrato poder adquirir la propiedad del vehículo.
Es un sistema donde se financia a través de cuotas de pago preestablecidas a través de contratos firmados por las partes, ofreciendo la oportunidad de comprar el vehículo.
Se diferencia del renting mayormente en cuanto a quienes pueden optar por poder utilizar el leasing como sistema; pues, solo puede ser usado por personas jurídicas o quienes sean autónomos. Es decir, que a diferencia del renting que puede ser utilizado por cualquier persona sea natural o jurídica, para el leasing existe una limitante a solo empresas o personas trabajadores autónomos.
Y su mayor, ventaja y diferencia con el renting es esa oportunidad de adquirir la propiedad del bien con la finalización del contrato que no se ofrece en esa modalidad.
Es decir, el sistema de leasing funciona esencialmente como un alquiler de vehículo pero su particularidad sucede con la posibilidad de ser propietario de su propio vehículo (poniendo como ejemplo los coches, que es el objeto de este artículo pero ya se dejó claro que está disponible para algunos otros bienes).
Con el cumplimiento o consumación del contrato se puede escoger en ejecutar la opción de compra del vehículo que se pone a su disposición con pago residual que debe constar en el contrato (no es obligatorio hacer ejercicio de este derecho). También pueden elegirse opción de prórroga del contrato a través de nueva negociación o incluso cambiar el vehículo para iniciar un nuevo contrato.
Lo que quiere decir, que al acabar el contrato de renting se presentan dos opciones, ampliar, renovar o prorrogar el contrato y en el caso del leasing, además se ofrece ejercer la compra.
¿Qué es un plan leasing?
Los planes de leasing como se dijo, son contratos donde se arrenda un vehículo con la opción final de adquirirlo si así lo desea. Estos planes pueden ser cerrados o abiertos.
Cuando se opta por un plan de leasing cerrado, al final del contrato se reintegra el coche y en caso de poseer desgastes, malfuncionamientos o excesos de kilometraje se deberá pagar en consecuencia pero sin más obligaciones.
En el caso del leasing abierto, existe el compromiso de comprar el vehículo, según el precio que se haya determinado al momento de realizar el contrato.
¿Qué se puede incluir dentro del contrato de renting?
En el contrato debe incluirse las obligaciones de las partes como mantenimiento o obligaciones administrativas, pagos, uso del bien, autorización para el uso y penalizaciones en caso de incumplimiento. Es decir, como en todo contrato debe incluirse toda la información necesaria para el correcto cumplimiento del contrato y prever en caso de situaciones las acciones a seguir.
¿Qué es un contrato de renting?
Es un acuerdo de voluntades en los cuales una persona física o jurídica recibe en carácter de arrendamiento un bien (coche) a cambio de lo cual, deberá realizar pagos periódicos como contraprestación de arrendar un bien que no es de su propiedad.
En él se expresan las normas por las que se regirá el arrendamiento y cuáles son las obligaciones de ambas partes.
Renting es una herramienta muy útil para quienes no cuentan con un medio de transporte propio o no quieren preocuparse por reparaciones y seguros; en el caso del leasing también representa una gran opción pues propone la oportunidad de al final, adquirir el vehículo.